Titulares

6/recent/ticker-posts

Header Ads Widget

Emotivo homenaje a doña Mary Pérez Marranzini en la sede de Rehabilitación

 Su ejemplo de liderazgo ético, ternura en el servicio y compromiso con la dignidad humana sigue vivo en cada rincón de Rehabilitación y en cada uno de los pacientes y usuarios.

Santo Domingo, República Dominicana. - En un acto lleno de recogimiento y profundo afecto, la sede central de Rehabilitación se convirtió este jueves en un espacio de tributo para honrar la memoria de doña Mary Pérez Marranzini, quien fue su fundadora, guía incansable y alma de servicio durante más de seis décadas.



La carroza fúnebre con los restos mortales de doña Mary fue recibida con respeto y amor por empleados, pacientes, miembros de la Junta Directiva Nacional y directivos de la institución, así como por su hijo, Celso Marranzini, quien agradeció emocionado las muestras de afecto hacia su madre. Su presencia, cálida y serena, fue acompañada por oraciones, lágrimas y un sentimiento compartido de gratitud por su legado humanitario.

El reverendo Augusto Sandino Sánchez, primer vicepresidente de la JDN, ofreció una sentida oración por el eterno descanso de su alma, destacando su entrega al prójimo, su fe y transparencia inquebrantables, y su vida dedicada a servir con humildad y compasión a quienes más lo necesitan.

Su hijo Celso, motivo de fundación de Rehabilitación, expresó con voz quebrada su agradecimiento “A la gran familia de Rehabilitación y a cada persona que ha expresado su solidaridad. Cumpliremos el deseo de Mamá Mary trabajando para que Rehabilitación, su gran obra, permanezca durante muchos años más, para que nadie se quede sin se atendido.”

 


Pacientes y colaboradores comentaban entre sollozos el amor y la admiración que inspiró doña Mary, cuyo ejemplo de liderazgo ético, ternura en el servicio y compromiso con la dignidad humana sigue vivo en cada rincón de Rehabilitación y en cada uno de los pacientes y usuarios.

Fiel a su deseo en vida, se pidió que, en lugar de flores, quienes deseen rendirle homenaje lo hagan mediante aportes a la institución que fue su obra más querida, a nombre de la Asociación Dominicana de Rehabilitación, RNC: 401-05344-6. BanReservas: Cta. Corriente 030009945-2 y Banco Popular: Cta. Corriente 0130485-2.

La memoria de doña Mary no se apaga: vive en cada persona rehabilitada, en cada sonrisa recuperada, en cada vida transformada por su visión. Su luz, sin duda, seguirá guiando a generaciones.

Publicar un comentario

0 Comentarios